
Don Víctor: Total, que la directora de la Guardia Civil tiene que dimitir, y cito textualmente, porque su “pareja” ha delinquido.
Don Hugo: ¿Su pareja? ¿Cuál de ellas? La Benemérita tiene miles de parejas. ¿Serán sus dos escoltas?
Don Víctor: ¡Quia! Todo por no decir su “marido”. Eso parece que ya no existe… Su pareja: el señor o la señora con quien se convive.
Don Hugo: Se trata, orwellianamente, de cambiar la realidad y el derecho natural a través de la intervención en el lenguaje….
Don Víctor: Arteramente, modificando el lenguaje, se apoca la libertad de expresión y, por ende, la libertad de opinión.
Don Hugo: Bien, don Víctor, pero entonces qué hacemos con la pareja de la Guardia Civil de toda la vida. ¿Los casamos?
Don Víctor: Sí, pero siempre que sea por lo civil… y no por lo militar.