
Don Hugo: Fíjese, don Víctor, una lata de chocolate «Matías López».
Don Víctor: ¿Chocolate, dice usted?… ¿Ése que tomábamos en la postguerra?
Don Hugo: ¿Sabe usted lo que el propio fabricante contestó a un adulador que le sugería echar menos cacao a su chocolate?
Don Víctor: No acierto a imaginarlo, don Hugo.
Don Hugo: «¿Echar menos cacao?… Hijo mío, eso es imposible».